Acabar los estudios obligatorios implica tener que tomar decisiones. Si se opta por seguir estudiando, cosa de lo más recomendable, básicamente las dos opciones más populares son:
Las dos opciones son buenas pero se debe tener claro que se quiere hacer y hacia donde nos queremos dirigir. Normalmente los ciclos formativos de grado superior están pensados para ocupar un cargo de más responsabilidad, convirtiéndose en la mayoría de casos en técnicos superiores para poder supervisar algunos procesos y planificar la programación de actividades y acciones. También entra entre sus tareas el poder dirigir a equipos de personas, planificar su ritmo de trabajo, etc.
Para escoger si queremos una opción u otra podemos hablar con algún asesor académico del centro en donde se están realizando los estudios obligatorios, ya que son ellos quienes podrán ayudar mejor al alumno porque lo conocen y conocen también la amplia oferta formativa de los estudios paralelos a los universitarios. Debemos pensar que este tipo de estudios están pensados para enfocarse a lo práctico, de manera que las horas de teoría son más pocas que en otros estudios (como bachillerato o universidad) y que incluyen un periodo obligatorio de prácticas, para entrar de lleno en el mundo laboral.
En caso de no querer estudiar bachillerato se puede empezar con un grado medio y luego intentar pasar al grado superior. Existen pruebas también para personas que quieran entrar directamente a estudiar un ciclo. Son un poco parecidos, en esencia, a los exámenes que se hacen para entrar en la universidad.
Sea cual sea la opción que escojamos, deberemos tener en cuenta algunas cosas, como por ejemplo:
Si queréis formaros en artes plásticas, diseño, deporte, teatro, danza, etc. Debéis estar aún más al caso: en la mayoría exigen prueba de acceso y debemos tener en cuenta que se deben preparar bien si queremos entrar a estudiar allí. Si quieres saber más te recomendamos este artículo: Artículo GenbetaDev.